viernes, 13 de marzo de 2015


Platos rotos

"No existen hombres que nunca hayan roto un plato. No ha nacido el genio que nunca fracase en algo. Lo que sí existe es gente que sabe sacar fuerzas de sus errores y otra gente que de sus errores sólo saca amargura y pesimismo. Y sería estupendo educar a los jóvenes en la idea de que no hay una vida sin problemas, pero lo que hay en todo hombre es capacidad para superarlos. 
No vale, realmente, la pena llorar por un plato roto. Se compra otro y ya está. Lo grave es cuando por un afán de perfección imposible se rompe un corazón. Porque de esto no hay repuesto en los mercados."
El escrito no es mío, sino de Martín Descalzo, un sacerdote nacido en Toledo (como Miguel) pero vallisoletano de adopción, que además de ser un gran cura lleno de humanismo, escribía muy bien. 

No hay comentarios:

Publicar un comentario